ALABANDO A DIOS JUNTOS

DIA 40

“Anímense uno a otros con salmos, himnos y canciones espirituales. Canten y alaben al Señor con el corazón”. Efesios 5:19 (NVI).

¡La adoración es un festival, no un funeral!

Si alguien en la tierra tiene el derecho a celebrar, somos aquellos que hemos entregado nuestras vidas a Cristo y ¡hemos sido aceptados en la Familia de Dios! ¡Sólo piensa en todo lo que Dios ha hecho por nosotros!

Al confiar en Cristo, Él nos ha:

¡Dado una nueva vida de propósito y significado!

¡Perdonado por cada pecado, error y fracaso!

¡Amado incondicionalmente y aceptado!

¡Provisto de una familia espiritual para nuestro apoyo!

¡Liberado de la preocupación porque Dios está en control!

¡Ofrecido el poder de Dios para sobreponernos a las heridas, hábitos y daños!

¡Dado la Palabra de Dios con los principios para una vida con éxito!

¡Liberado de la vergüenza, remordimiento y resentimientos!

¡Asegurado que Satanás no puede llevarse nuestra salvación!

¡Consolado sabiendo que “Dios hace todas las cosas para nuestro bien”!

¡Capacitado para afrontar cada día con esperanza y con una fe optimista!

¡Equipado con dones espirituales, talentos, y habilidades para ser usados!

¡Protegido con todas las promesas de Dios!

¡Provisto de todo lo que necesitamos!

¡Garantizada vida eterna en el cielo!

Si todos estos beneficios no te animan a celebrar, ¡necesitas tomarte el pulso!

Es irónico que en nuestra cultura sea aceptable emocionarte acerca de cualquier cosa, excepto por Dios. Puedes ir a eventos deportivos y gritar con todas tus fuerzas, puedes saltar de arriba abajo, abrazar, llorar, levantar tus manos y las personas sonreirán  con aprobación  y dirán que eres un “fan”. Pero si muestras alguna alegría, emoción o entusiasmo en la adoración, entonces te llamaran “fanático”. 2 Samuel 6:5 (NVI) nos dice “David y todo el pueblo de Israel danzaban ante el Señor con gran entusiasmo y cantaban al son de arpas, liras, panderetas, sistros y címbalos”. Esto debió haber sido ¡divertido y ruidoso! Pero Mical la esposa de David, estaba más preocupada por su dignidad que por la celebración, y respondió a su esposo por su adoración entusiasta (2 Samuel 6:16-20). Tristemente, la actitud de Mical todavía priva a muchas iglesias de disfrutar la adoración y el compañerismo como una comunidad de creyentes.

Dios ama escuchar que sus hijos canten sus alabanzas. Salmos 150:6 (NVI) dice

“!Que todo lo que respira alabe al Señor

¡Aleluya! ¡Alabado sea el Señor!”.

En salmos 149:1 (NVI) se nos dice el tipo de canción a cantar:

“Canten al Señor un cántico nuevo, alábenlo en la comunidad de los fieles”. ¿Por qué una nueva canción?, porque Dios quiere hacer algo fresco en nuestras vidas.

La Biblia está llena de celebraciones, fiestas, festividades y feriados, porque son formas importantes de marcar el progreso en nuestras vidas. Hay un gran poder en recordar fechas. Pero frecuentemente estamos tan ocupados moviéndonos hacia nuestra próxima actividad o tarea que no paramos y celebramos lo que ha hemos logrado.

Al concluir nuestros 40 Días de Comunidad este fin de semana, prepara tu corazón, y ven a la iglesia esperando celebrar con otros. Esta es tu tarea final: Haz una lista en tu diario o agenda de todas las cosas buenas que has visto, que Dios ha hecho durante estas 6 semanas en tu vida, en la de tu familia, en tu grupo pequeño o con otros durante la Celebración de este fin de semana.

Apocalipsis 5:11-13 nos dice que en el cielo   va haber ¡una gran celebración! Empecemos a practicar nuestras habilidades de celebración hoy mismo, para que ¡nuestros corazones estén listos para el cielo! El tiempo que pasamos cantando alabanzas aquí en la tierra sólo nos abrirá el apetito para el día cuando el Canto nunca terminará.

PARA MEDITAR

Cada vez que celebro a Dios con mis hermanos, estoy practicando para el cielo.

VERSÍCULO PARA RECORDAR

¿Y mi alma se regocijará en el SEÑOR; en su salvación se gozará”. Salmos 35:6 (LBLA)

PREGUNTA PARA CONSIDERAR

Cuando adoras. ¿Estás más preocupado en lo que otros piensan o en lo que Dios piensa?

Loading

Deja un comentario