DIA 16
“Esforcémonos por promover todo lo que conduzca a la paz y a la mutua edificación”. Romanos 14:19
La comunidad se construye a través del compromiso.
Una comunidad cristiana saludable está comprometida en amarse unos a otros, a que trabajen unos con otros y permanezcan unos con otros. La Biblia dice: “En fin, el fruto de la justicia se siembre en paz para los que hacen la paz” (Santiago 3:18)
Esto es más que llevarse bien con los demás. Significa que en realidad vemos el valor de cada individuo en nuestro grupo pequeño. Vemos a cada uno como creación de Dios y como vasijas de la gracia de Dios.
Significa que nos comprometemos a estar allí para unos y otros. “Que gobierne en sus corazones la paz de Cristo, a la cual fueron llamados en un solo cuerpo. Y sean agradecidos”. (Colosenses 3:15).
Dios nos creó para esta clase de entrega. Él está entregado a nosotros, y espera que nosotros nos entreguemos a Él y luego a los demás (2Corintios 8:5). Es por el diseño de Dios que, definimos nuestras vidas por nuestros compromisos: matrimonio, hijos, trabajo e iglesia.
Construir una comunidad comprometida toma tiempo. Esto significa vivir la vida juntos más allá de nuestras reuniones semanales y hacer de unos y otros nuestra prioridad, compartiendo nuestras vidas con un café después del trabajo, en el estadio, en el hospital.
Significa ir más allá de amistades superficiales. Significa llegar a ser “amigos más fieles que un hermano”. (Proverbios 1824). Debemos enfocarnos en la calidad de nuestras relaciones y no en la cantidad de las mismas. No necesitamos muchos amigos en esta vida, necesitamos pocos amigos pero que sean buenos amigos. En nuestros grupos pequeños podemos ser así unos con otros.
Comprometerse unos con otros significa:
Amar, sin condiciones. Debemos querer y apoyarnos unos a otros en todo tiempo, no sólo cuando es conveniente (Proverbios 17:17); debemos amar a las personas aún en el peor de los casos, no solo cuando son agradables.
Estando allí unos con otros. Un signo básico de compromiso es simplemente hacer acto de presencia. Si nos importa, estaremos allí. Nuestra presencia es una fuente de ánimo (Hebreos 10:25), pero estar allí también significa que estamos comprometidos con la vida de los demás. El misionero Jim Eliot, dijo una vez: “Donde te encuentres debes estar presente en cuerpo y alma”.
Beneficiándonos unos con otros. Dios nos ha dado a cada uno de nosotros habilidades particulares con el propósito de compartirlas con los demás. “A cada uno se le da una manifestación especial del Espíritu para el bien de los demás”. (1Corintios 12:7). Nuestros grupos pequeños y nuestras congregaciones son más pobres sino usamos libremente nuestros dones espirituales par el beneficio de todos (Romanos 12:4-5). Comprometernos significa que nos reconocemos unos a otros como partes de un gran cuerpo que está trabajando unido. (Romanos 12:4-5)
¿Con quién o con qué estas comprometido? Y ¿quién lo sabe?
¿Alguna vez has ido donde otra persona, que no sea tu familia y le has dicho “Quiero que sepas que siempre estaré contigo, siempre podrás contar conmigo”? ¿Alguna vez has hecho un compromiso intencional con alguien, diciendo: “Quiero crecer cerca de ti como un amigo”? ¿Harás esto en tu grupo pequeño esta semana?
PARA MEDITAR
La comunidad se construye a través del compromiso.
VERSÍCULO PARA RECORDAR:
“Esforcémonos por promover todo lo que conduzca a la paz y a la mutua edificación”. Romanos 14:19
PREGUNTA PARA COSIDERAR
Si preguntaras a uno de tus buenos amigos, ¿En qué o con quién piensan ellos que estás comprometido? ¿Qué te responderían?